El pasado
día 27 de noviembre nos volvimos a reunir en el restaurante el Lirio situado en
el paseo el Pedregal de Málaga frente al mar.
En esta ocasión nuestro anfitrión
fue nuestro querido amigo Antonio Domínguez Martín
El día amaneció muy turbulento, la
noche anterior una fuerte tormenta azotó Málaga, que se prolongó por la mañana,
es más sobre las doce se produjo un aguacero, que creímos nos haría imposible
al reunión. Afortunadamente después de la fuerte lluvia se hizo un claro, que
facilitó incluso la salida del Sol.
A pesar del mal tiempo nuestros
amigos y compañeros no se achicaron, hasta tal punto que llegamos a ser
veinticinco asistentes.
Aplaudimos la firmeza de Jacinto
Ruíz del Portal y Rafael Serrano Carvajal, Miguel Lara Flores, y algunos otros,
que a pesar de los achaques que les afectan asistieron al evento a pesar de las
dificultades que presentaba el día.
El menú fue abundante y variado.
Después de la copa de entrada con su aperitivo de aceitunas, tomamos unos
entremeses muy malagueños: boquerones en vinagre, anchoas con tomate,
croquetas, y espetos de sardinas. El primer
plato fue un “gazpachuelo”, plato típico del restaurante que fue una delicia. Para completar el segundo
plato nos sirvieron unas frituras de boquerones, salmonetes y pescado en adobo, que terminó con postres, café
y copa. La comida fue regada con vino blanco de Rueda y tinto de Rioja.
A los postres bajo la moderación
de nuestro decano Francisco Muñoz Ortega, intervinieron los compañeros.
El primero en intervenir fue nuestro
anfitrión, que agradeció la asistencia, y completó su alocución invocando al
espíritu que nos alienta: nuestra formación en el querido colegio de los H.H.
Maristas de Málaga, que ha permitido la creación y mantenimiento de nuestro grupo
durante tantos años. A continuación intervinieron Nicolás Martín Arroyo,
Antonio Graciani, Diego Montañez, que culminaron con un chiste de Juan Gálvez
Cueto.
Felicitamos a nuestro anfitrión
por la elección del restaurante, la buena organización del acto y el esmerado
trato del que fuimos objeto por parte del servicio.
Como siempre a continuación
incluimos el excelente reportaje
fotográfico realizado por nuestro incondicional amigo: Eugenio Vargas-Machuca
de Alva, al que agradecemos su fidelidad y buen hacer.
Pandilla
Zarco. 
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